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Lubricación Industrial: Todo lo que necesitas saber

¿Quieres saber más sobre el mantenimiento industrial? En el artículo de hoy te hablaremos sobre la lubricación industrial, una de sus principales labores. Entraremos en detalle en sus beneficios, así como en los diferentes tipos y sistemas de lubricación que existen.

Hoy en día es clave contar con una formación especializada para trabajar en un sector como la industria 4.0 y en Mint somos muy conscientes de eso. Por ello, tenemos disponible un Máster en Mantenimiento Industrial 4.0 para que adquieras los conocimientos necesarios y te desarrolles en este sector. 

 

¿Qué es la lubricación industrial y por qué es importante?

La lubricación industrial es una labor de mantenimiento que reduce la fricción de las superficies y maquinaria, con el fin de evitar su desgaste e imperfecciones y ayudar en su deslizamiento. 

Es habitual aplicar esta lubricación en equipos que tienen un movimiento continuo, por ello resulta de vital importancia de cara a evitar la ruptura de las piezas.

Esta aplicación consiste en colocar sustancias grasosas sobre estas superficies, tales como rodamientos, para disminuir, o evitar completamente, su corrosión, y favorecer a su movimiento suave. 

 

Beneficios de la lubricación industrial en maquinarias

Son muchos los beneficios que aporta la correcta lubricación industrial en los equipos y maquinaria. Desde Mint te contamos cuáles son los principales que debes saber: 

  • Eficiencia energética: reduce considerablemente el consumo de energía de la maquinaria al favorecer su movimiento, gracias a las sustancias aceitosas que aumentan el rendimiento de los equipos
  • Protege el equipo de la corrosión: ayuda a que el movimiento y roce entre dos superficies sea mucho más suave, evitando considerablemente la corrosión de las mismas
  • Mayor control y reducción de temperatura: el calor generado en la maquinaria es absorbido por el lubricante
  • Reduce la fricción y el desgaste: las superficies se mantienen resbaladizas, por lo que la fricción es mucho más moderada

 

Tipos de lubricantes y su función en la industria

Existen diversos tipos de lubricantes industriales, en función de las superficies sobre las que se quiera aplicar, y del estado y naturaleza de las mismas:

En función de su estado:

  • Lubricantes sólidos
  • Lubricantes gaseosos
  • Lubricantes líquidos

Según su naturaleza: 

  • Bases minerales
  • Bases sintéticas
  • Bases vegetales
  • Bases animales

Los cuatro tipos de lubricantes industriales más comunes son: aceites, grasas, lubricantes secos y penetrantes. 

Los aceites se utilizan sobre los equipos que necesitan de temperaturas elevadas y una gran velocidad para funcionar. Gracias a su aplicación, se evita la oxidación de las superficies. En su defecto, para aquellas maquinarias en las que no se puedan utilizar estos aceites, se aplican diferentes tipos de grasas. 

Por otro lado, los lubricantes secos son perfectos para su aplicación en superficies que ya tengan un grado de corrosión o que funcionen con temperaturas demasiado elevadas. Por su parte, los lubricantes penetrantes son utilizados, por lo general, para realizar pequeñas incisiones en grietas. 

 

Sistemas de lubricación industrial

Un sistema de lubricación industrial es la cantidad detallada de un determinado lubricante que se aplica sobre diferentes maquinarias o equipos. Todo ello a través del método correcto y el tipo de lubricante idóneo para lo que se quiera conseguir. 

Vamos a detallar en qué consisten los dos tipos de sistema de lubricación más comunes en las empresas y fábricas: lubricación por aceite y por grasa.

Sistemas de lubricación por aceite

El aceite industrial cuenta con un alto grado de viscosidad, lo que facilita su trabajo en las superficies. Entre estos aceites, los más recomendables son los minerales, ya que su resistencia es mucho mayor que en el caso de los aceites orgánicos

A su vez, un sistema de lubricación por aceite está diseñado para enfriar y lubricar los engranajes que, por su esfuerzo, cuentan con grandes temperaturas. Este aceite protege las piezas sobre las que se aplica y se renueva gracias a un sistema de lubricación automático. 

Sistemas de lubricación por grasa

Los sistemas de lubricación por grasa son muy efectivos a la hora de proteger a la maquinaria frente a la corrosión. Su principal desventaja frente a los sistemas de lubricación por aceite es que la efectividad de estos dura menos tiempo y no cuentan con la capacidad de enfriar las piezas.

En este caso, el nivel de lubricación de la grasa depende de la velocidad con la que trabaje el equipo.

 

Mantenimiento de la lubricación industrial

Teniendo en cuenta que la lubricación industrial es una herramienta fundamental de mantenimiento, debes contar con una formación adecuada en este ámbito para saber en todo momento qué hay que hacer y evitar las averías mecánicas. 

Debes ser consciente del nivel de lubricación exacto que necesitan las piezas, ya que tanto el exceso, como la falta de lubricante, son perjudiciales para su correcto funcionamiento. 

Importancia del mantenimiento preventivo en la lubricación industrial

El mantenimiento preventivo en la lubricación genera grandes beneficios, tanto de cara al estado de la maquinaria, como en la detección de averías a tiempo. 

Realizar el correspondiente análisis de aceites y grasas es fundamental para conocer la situación en la que se encuentra el lubricante y conocer, de esta forma, si es necesario un cambio. Además, también permite estudiar el desgaste de las piezas y evaluar su nivel de corrosión u oxidación. 

Indicadores de falta de mantenimiento

Manipular un lubricante de forma inadecuada puede acarrear múltiples problemas, tales como la corrosión y oxidación ya mencionadas, no cumplir con el efecto esperado tras utilizar un lubricante no adecuado para una pieza concreta o contaminar el lubricante por su mala aplicación en la superficie. 

Problemas más comunes en la lubricación industrial

Entre los problemas que se pueden ocasionar en la lubricación industrial destacan los siguientes:

  • Poca o mucha cantidad de lubricante
  • Lubricante degradado por nulo mantenimiento
  • Contaminación del lubricante
  • Uso inadecuado de lubricantes y mezcla de los mismos
  • Mala circulación del lubricante

 

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